CRÓNICA REAL MADRID – BORUSSIA DORMUNT: VICTORIA DEL REAL MADRID Y PASE A LAS SEMIFINALES EN UN GRAN PARTIDO CON FINAL AGRIDULCE
El Real Madrid jugó un gran partido en el que nos hizo disfrutar en el Metlife Stadium de Nueva Jersey. Un partido controlado de principio a fin, excepto los últimos 7 minutos, los cuales nos han podido costar caros.
La evolución del equipo desde el primer encuentro con el Al-Hilal es más que visible.
Un equipo ordenado, compacto, en el que ya se empiezan a ver jugadas ensayadas y con un trabajo intensivo que hace disfrutar de verdad cada partido que juegan.
De nuevo, la mayoría de afluencia madridista nos hizo sentir en casa, a pesar de estar a tantos miles de kilómetros de nuestro templo.
Como es mejor no cambiar lo que ya funciona bien, Xabi Alonso decidió utilizar la misma alineación.
Courtois en la portería, defensa de cuatro con Trent, Rüdiger, Huijsen y Fran García, como laterales, Tchouaméni, Bellingham, Arda Güller y Valverde en el centro del campo y Vinicius y Gonzalo en la punta del ataque. Una titularidad muy merecida para el canterano, que está en plena forma y firmando unos partidos espectaculares. Suyo ha sido el primer tanto merengue con un gran partido de nuevo, certificando que debe seguir como delantero centro de la zaga vikinga.
Tiene muchas posibilidades de ser el pichichi del Mundial de Clubes. Esperemos que lo consiga. Gonzalo debe seguir siendo titular. Nadie tiene ninguna duda de esto.
El Real Madrid dominó desde el principio el partido, siendo una auténtica apisonadora y poniendo en serios aprietos al Borussia Dortmund que, durante muchos minutos, se vio sin ideas de cómo frenar el ataque blanco.
Esta vez, se decidió llevar el juego por la banda izquierda, con Fran García jugando en algunos momentos como extremo, en lugar de por el centro como se ha hecho en los partidos anteriores.
El Madrid había estudiado al rival y conocía su gran debilidad: la defensa. Y dentro de ella, el lateral izquierdo, cosa que ha sabido aprovechar hoy muy bien Fran García, que en un partido muy completo. Seguimos necesitando un fichaje para esa posición porque con él nos quedamos algo cortos, pero lo cierto es que ahora mismo está en un gran nivel, con una seria evolución desde el primer partido contra el Al-Hilal.
Todo buen trabajo trae frutos y en el minuto 10 ya inauguramos el marcador con un gran gol de Gonzalo, que nos está acostumbrando a cantar goles suyos. Y nosotros encantados, claro.
Courtois inició jugada sacando rápido el balón para Gonzalo y éste, haciendo una gran conducción, dio un pase Alexander-Arnold. El inglés supo ver la posición de Fran, que lo asistió para que éste marcara.
El Real Madrid jugaba verticalmente, con transiciones rápidas que le permitían llegar rápidamente al área de Kobel. Muchas cosas que analizar de este juego, para bien, en el que continuamente había intercambio de posiciones entre centrales y laterales, e incluso entre Vinicius y Fran García en la que el manchego jugó unos minutos como extremo y el brasileño se escoró un poco hacia el centro jugando por el interior.
Los siguientes minutos del 15 veces campeón de Europa fueron un deleite para los ojos. Cada vez disfrutamos más con este equipo que ataca y crea un juego bien trabajado. El Borussia Dortmund no es un equipo que se encierre en su área, sino que juega al ataque abriendo muchos espacios que el Madrid aprovecha, aunque no consigue aumentar la distancia.
Ya pasado el ecuador de la primera parte, el Madrid fue bajando el ritmo para controlar y llevar el partido hacia donde más le interesaba. Eso no significó en ningún momento que recularan o dejaran de atacar, sólo bajaron la intensidad un poco. Aún dio tiempo de lanzar algunas contras con peligro en las que tanto Vinicius como Bellingham tuvieron oportunidades de agrandar el marcador en los últimos primeros minutos de la primera parte.
Tras el descanso, el partido prosiguió como había acabado.
El minuto 66 fue el elegido para que Xabi Alonso realizara los primeros cambios. Un cambio triple en este caso en el que decidió cambiar a Vinicius, Bellingham y Trent, para dar entrada a Ceballos, Modric y Mbappé.
La intención era clara: tener más el balón y dominar el partido a través de él para conseguir una posesión que permita ralentizar o acelerar el juego según nos convenga.
Modric, que está firmando unos muy buenos minutos en sus últimos partidos con la camiseta del Real Madrid, tuvo una gran oportunidad en el minuto 74. Qué lástima que no lograra convertirla, porque hubiera sido un gran broche. Ojalá la diosa fortuna quiera que el croata marque un gol en el próximo partido.
A pesar del claro dominio blanco, el Borussia Dortmund no se echó atrás ni se acobardó. Siguió atacando, aunque sin una idea definida. Perdía el balón con facilidad y el Madrid recuperaba rápidamente sin permitirle que se acercara al área.
9 Minutos más tarde, el técnico español decidió darle descanso a Tchouaméni y sacar a Asencio al césped.
Y tan sólo dos minutos después, realizó el último cambio que tengo que reconocer que me resultó algo sorprendente: dio unos minutos a Rodrygo, quizá para ponerlo en el escaparate del mercado a ver si algún equipo está dispuesto a hacer alguna oferta por el brasileño, cada vez con menos defensores dentro del equipo blanco. El cambio fue por Gonzalo, que ya se encontraba bastante cansado.
En el borde del minuto 5, cuando el partido tenía que terminar según los minutos añadidos por el colegiado brasileño, de produjeron varias situaciones que alteraron la tranquilidad con la que el encuentro se había venido desarrollando.
Es lo que ocurre en una eliminatoria de una competición. Nunca puedes subestimar a tu rival, aunque lleves dos goles de ventaja y el partido esté a punto de acabarse.
En el minuto 92 el Borussia acortó las distancias. Un mal despeje de Rüdiger en el área, regaló el balón a Beier, que chutó alejándola de tal manera que el bueno de Thibaut, quizá un poco mal colocado e incluso desprevenido, no pudo llegar.
Afortunadamente en el minuto 94, Kylian Mbappé se estrenó en el torneo con un vistoso gol de tijera.
Rodrygo salvó un balón de espaldas que iba a salir por el fondo del territorio del Dormunt, dio un pase a Arda Güller que estaba situado como extremo izquierdo en ese momento y éste asistió al francés, que firmó un gran gol. Muy bonita su dedicatoria al malogrado Diogo J.
Ya pensábamos que el árbitro iba a señalar el final del partido y que íbamos a poder celebrar nuestro pase a semifinales, pero nada más lejos de la realidad.
El Borussia Dortmund aprovechó un despiste del conjunto blanco para llegar al área de Courtois. Guirassy se quedó solo, con una clara oportunidad de marcar gol. Huijsen quiso impedirlo y cometió un grave y a la vez infantil e incluso inocente error: un claro agarrón dentro del área a Guirassy. Ramón Abatti no tuvo dudas: penalti y expulsión del jugador madridista.
Un castigo excesivo con una norma que yo creía extinta, pero que no daba lugar a discusión. El penalti es claro y se comete al último jugador. Nada que discutir
El mismo Guirassy fue el encargado de transformar la pena máxima con un trallazo potente, imparable para el cancerbero belga.
Se añadieron unos pocos minutos más tras esta acción, pues se desató un poco de revuelo con varios jugadores blancos pidiendo explicaciones al colegiado, que se saldó con una tarjeta a amarilla para Mbappé.
El Borussia no se rindió. Vio que aún podía tener una posibilidad de forzar una prórroga y Sabitzer se atrevió a realizar un disparo que atrapó Courtois con una gran parada digna de su firma.
Un poco de pimienta siempre viene bien cuando te juegas el pase a una semifinal, aunque nosotros hubiéramos preferido terminar el partido con el 3-1.
El PSG, que hoy ha firmado un partido épico especialmente a partir de la segunda parte, nos espera para jugarnos el pase a la gran final.
Errores importantes a corregir que tendrá que trabajar el bueno de Alonso para que no volvamos a tener una desconexión así en un partido que hemos tenido controlado todo el tiempo y en el que se ha jugado a tan alto nivel. No nos preocupa porque sabemos que no volverá a pasar.
La rabia es perder a Dean Huijsen, el central más en forma que tenemos ahora mismo y que está jugando maravillosamente bien, no sólo porque el partido sea tan importante como una semifinal, sino porque el rival es un hueso muy duro de roer y precisamente le necesitábamos más que nunca.
Pero el Real Madrid ha toreado en peores plazas. El miércoles saldremos de dudas y conoceremos si el tolosarra se decanta por Asencio o prefiere confiar en Tchouaméni para pareja de Rüdiger en la defensa.
Lo que sí tengo claro es que es un partidazo que estoy deseando ver al igual que vosotros. Vivimos para esos partidos.
No será fácil, infartaremos en algún momento y, quizá, incluso haya que tirar de épica. Pero el Real Madrid nos ha demostrado tantas veces lo que es capaz de conseguir, que no nos queda otra que confiar en la victoria.
¡HALA MADRID!
Por Olga (@OlgaUnMundo en X)
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